EL
ABACO EN LA ESCUELA PRIMARIA
Rubén
Darío Betancurt Osorio Ps.
Investigador
en Matemática Lúdica - CORPOLÚDICAS
El ábaco tiene dos
funciones primordiales: primero, constituye un modelo de representación de los
sistemas numéricos; al mismo tiempo, éstos son una de las representaciones de
los números naturales que hacen parte de los contenidos matemáticos esenciales que
la escuela enseña; segundo, es una “calculadora transparente” porque permite
“ver” el sentido de la operación que se realiza, diferente de una “calculadora
digital” que solo muestra el resultado.
El ábaco se considera una de las pocas herramientas matemáticas que se
ha encontrado en la mayoría de culturas del mundo y en lugares tan apartados
como asía y américa, guardando relaciones sorprendentemente similares. Algunos
autores consideran que este instrumento permitió a la humanidad construir aspectos esenciales del conocimiento
matemático.
El uso del ábaco en el
salón de clase resulta de gran ayuda, pues al igual que otros materiales
estructurados (bloques multibase de Dienes, monedas y billetes, etc) facilita
la comprensión de toda la lógica operatoria de cualquier sistema numérico. De
tal forma, docentes y tutores pueden ayudar a niños y niñas en la construcción
y aprendizaje de las bases esenciales de uno de los contenidos más importantes
y controversiales de la educación matemática en primaria: los números
naturales.
Alrededor del ábaco se
pueden formular situaciones, y si se quiere, proyectos de aula, en los que se
pueden integrar las ciencias sociales y naturales, al tener la oportunidad de
analizar con los estudiantes las condiciones socioeconómicas en las que
culturas como la babilónica, la árabe,
la hindú (a las que le debemos más de la mitad del conocimiento
matemático hoy en día), etc. produjeron muchas de las invenciones matemáticas
que han llegado hasta nosotros. De otro lado, el uso del ábaco para la
realización de operaciones básicas, incluidas la potenciación y la radicación,
proporciona un contexto ideal para el desarrollo del pensamiento y el
razonamiento lógico-matemático. Investigaciones llevadas a cabo en México y
España, muestran empíricamente, el avance en el cálculo mental y la adquisición
de estrategias óptimas para el análisis matemático de estudiantes de la básica
secundaria; no obstante, son resultados preliminares en discusión.
Breve
historia de los ábacos
El ábaco es uno de los
instrumentos más universales que se conoce. Ha sido encontrado en casi todas
las culturas del mundo antiguo y moderno. Su estructura física constituye un
modelo para la representación de casi cualquier sistema numérico; a la vez,
permite observar y deducir toda la lógica operatoria que subyace a dichos
sistemas. Estas características lo hacen adecuado para efectos pedagógicos y
didácticos, debido a su gran versatilidad, no solo en el manejo de sus
componentes sino también en la “transparencia” que posibilita cuando se
fabrican números y operaciones en él.
Ifrah (1985) sugiere
que el origen de los sistemas numéricos se situó en la necesidad de unitizar
grandes cantidades que en un principio se enumeraban. Parece ser, que la
primera unidad compuesta estuvo cimentada en base 10 (patrón de dedos de las
manos), aunque las evidencias históricas, señalan que los sumerios y los
babilonios usaron la base 60 para la confección de los calendarios.
Una de las evidencias
que se tiene de los primeros ábacos viene de los etruscos, quienes habían
diseñado una superficie plana de arena muy fina en la que trazaban surcos con
la punta de un madero e inscribían muescas para representar los números, este
instrumento se conoció con el nombre de abacus numerorum, que pasó a ser un
tablero con divisiones paralelas, las primeras para las unidades, la segunda
para las decenas, etc. Posteriormente, las muescas fueron reemplazadas por
pequeños guijarros a los que se les asignaba un valor de acuerdo con la
posición en que se colocara. Luego, las columnas se convirtieron en ranuras y
fue el usado por los romanos. Los antiguos ábacos romanos consistieron en un
tablero de cera cubierta con arena, ora una tabla rayada o bien un tablero con
surcos en los que se inscribían las muescas correspondientes a cada número,
posteriormente, las marcas se reemplazaron por guijarros lo que permitió la
movilidad en la representación, se había creado la primera calculadora rudimentaria
de la historia, que incluso facilitó la operación con fracciones decimales. A
partir de allí pasó a todos los pueblos neolatinos.
En Rusia, el ábaco fue
introducido por los mongoles, quienes a su vez lo habían adquirido de los
chinos y los tártaros. Allí se transformó en tres versiones denominadas Schoty
(se pronuncia chu’eti), con los cuales se podían realizar operaciones con
decimales. En América precolombina, los incas usaron el quipú (como especie de
una computadora) fundamentado en el
sistema de numeración en base 10, así mismo tenían un artefacto similar al
ábaco romano llamado la yupana (que significa tabla para contar) la cual se fundamenta
en dos sistemas numéricos, base 5 y base 10; aunque algunos antropólogos han
encontrado tres versiones distintas que se fundamentan en la integración de
distintos sistemas numéricos. Recientemente, se descubrió que los aztecas
usaban un ábaco en base 20 denominado Nepohualtzinczin, con un funcionamiento
similar a todos los ábacos clásicos.
Alejandro Humboldt,
Pott y otros refieren que la mayoría de los sistemas numéricos, tanto antiguos
como modernos, se centran,
principalmente, en base 5, 10 y 20. Esta
particularidad parece residir en el hecho mismo de tener manos y pies con cinco
dedos. En persa, pentcha ó pantcha tiene un doble significado: cinco y mano. En griego, penta significa cinco; en
latín quinque. Los chibchas expresaban cinco como mano; 11 como pie y
uno, 12 como pié y dos, ...etc. los aztecas indicaban con una especie de
muescas, los primeras cantidades hasta el 19; el extremo de una pluma
significaba 20; el extremo de otra pluma llena de polvo de oro o de otro color
indicaba 400. Los chinos inventaron un ábaco en una base rectangular compuesto
por trece varillas verticales en las que se colocan 7 cuentas por cada columna.
Dos cuentas estaban separadas por una varilla horizontal para indicar las
unidades en base cinco (las bolas del
cielo), éstas junto con las cinco cuentas de la parte inferior (las bolas de la tierra) conforman las
unidades en base 10. Este tipo de ábaco
se conoce con el nombre de swan-pan. El ábaco de los japoneses
consiste en una estructura de 12 varillas verticales y una vara de madera
horizontal que separa una cuenta superior que representa una unidad de cinco,
de las cuatro cuentas inferiores que representan las unidades, todas juntas
conforman una unidad de 10 que se representa con una cuenta en la columna
inmediatamente siguiente, a este instrumento se le conoce con el nombre de soroban.
En resumen, los ábacos se usaron para
representar la lógica operatoria de un sistema numérico determinado y pueden
cimentarse sobre una base numérica o dos bases numéricas simultáneamente.
DISEÑOS DE ÁBACOS PARA EDUCACIÓN INICIAL Y LA BÁSICA PRIMARIA
En las investigaciones llevadas a cabo en el salón de clase, hemos adaptado algunos ábacos para la enseñanza de las primeras nociones de unidad y decena, como tambien de las operaciones básicas (suma, resta, multiplicación, división, potenciación, logaritmación y radicación). En especial, se ha enfatizado en las representaciones numéricas del número natural. Aquí hay una muestra de los diversos tipos de ábacos adaptados para la enseñanza escolar.
DISEÑOS DE ÁBACOS PARA EDUCACIÓN INICIAL Y LA BÁSICA PRIMARIA
En las investigaciones llevadas a cabo en el salón de clase, hemos adaptado algunos ábacos para la enseñanza de las primeras nociones de unidad y decena, como tambien de las operaciones básicas (suma, resta, multiplicación, división, potenciación, logaritmación y radicación). En especial, se ha enfatizado en las representaciones numéricas del número natural. Aquí hay una muestra de los diversos tipos de ábacos adaptados para la enseñanza escolar.

No hay comentarios:
Publicar un comentario